Soñé que corria.

Vamos con toda la intención! con toda la adrenalina! con todas las ganas!... vamos a la cabeza del pelotón!. la gente me empuja con sus porras y sus ánimos!...

Que me duran los contrincantes!, esos que durante 4 o 5 meses fueron mis compañeros y que durante 4 horas son mis adversarios!. Después de estas 4 horas de adversarios seguirán otros 4 o 5 meses donde serán mis compañeros de nuevo!.

¿Pero que no se supone que corren juntos?.. ¡Pues si!. Pero vamos a la cabeza!.. y el premio solo hay para los primeros lugares!, y yo quiero ser de esos!.

¡Foto Foto!.. Volteo a ver al público y veo a los de la prensa con sus camarotas tomando fotos, levanto la mano para saludar.. y luego ya no puedo correr… se me han caído los pantalones….

¿He?..¿como?.. no se me cayeron los shorts, ni los pants, sino los jeans de mezclilla que nada tienen que ver con una competencia. 
Luego veo que ademas traigo zapatos, calcetines y una camisa tipo polo… ¿mande?..

¡chin! Seguro he de estar soñando!....

Pos si!... ni modo!.. me despierto y veo que son las 7 a.m. y que hoy domingo tenemos entrenamiento donde siempre: En la ruta recreativa de Saltillo… hoy tocan 15 kilómetros de entrenamiento.

Pero ¿pues si ya los corri no?... ¿no cuenta acaso todo el cansancio de mi sueño cuando soñe que corria?

Pues el soñar no cuesta nada pero sin embargo tampoco reemplaza a la realidad. 

Soñar despierto o dormido nunca substituirá al verdadero y real sentimiento de tomar la calle … y salir a correr!... 

¿Será que me preocupa mucho el maraton del DF y el 21K Coahuila?.. ¿será que ya estoy loquito?  Sera el sereno!.. Vamonos a entrenar … pos ha!